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Aunque era estudiante en la Preparatoria Técnica Médica de la UANL, la doctora Stephanie Proskauer Peña ya tenía algo muy claro: hacer investigación. Y de manera específica, de cerebro. En su decisión influyó la familia de una de sus mejores amigas de la infancia, donde todos sus integrantes son médicos.
Así, motivada y con una ambición académica muy clara, ingresó a la Facultad de Medicina (FACMED), donde se graduó de Médico Cirujano y Partero e inició ese anhelado sueño de hacer investigación. Actualmente, Proskauer Peña es líder de un proyecto científico vinculado al estudio del Alzheimer en el Centro Biomédico de la Universidad Charles de Pilsen, en la República Checa.
Cuando llegó al Laboratorio de Neurofisiología Experimental, en donde aplicó para obtener el trabajo como científica, se dio cuenta de que era la única mujer en el equipo, además de extranjera y la primera mexicana. A esto se sumó el hecho de adaptarse a una nueva cultura e idioma, así como establecerse con su familia integrada por su esposo e hijo.
Sufre la mujer deserción escolar
“Aproveché mucho mi tiempo de estudiante para poder formarme”, así resumió la neurocientífica lo que realizó para alcanzar la meta de hacer investigación, desde asistir a los investigadores de endocrinología, farmacología, es decir, otras disciplinas de la medicina que no es su área hoy.
Proskauer Peña avanzaba en sus estudios y cuando cursaba neurología y neurocirugía buscó ser becaria de las materias de Metodología de investigación y Medicina basada en evidencias, y encontró en el doctor Eloy Tamez (QEPD) la oportunidad de aprender de su experiencia e iniciar su proyecto profesional de hacer ciencia.
Otras iniciativas que presentó siendo alumna de la FACMED fue la creación de una revista estudiantil para divulgación científica y proponer la instalación de un grupo de becarios en investigación que sigue vigente.
“Tuve la iniciativa de presentar algunas propuestas y una de ellas el Dr. Rodrigo Elizondo Omaña, actual Subdirector de la Facultad de Medicina, la despegó bien, que es el Programa de Becarios de Pregrado en Investigación; en esa época de estudiante lo coordiné y consiste en reunir grupos de alumnos con cierto perfil para formarse como investigadores”, comentó Stephanie Proskauer Peña, Neurocientífica egresada de la UANL.
El doctor Gerardo González, Subdirector de Investigación en la FACMED, mantiene este grupo con integrantes de mucha calidad, ya que son jóvenes que, además de las materias que cursan, a la par van construyendo un currículum como investigadores.
“En sexto año de la carrera empecé a ver la posibilidad de irme al extranjero con becas CONACYT y otros financiamientos; observo que en el caso de las mujeres hay mucha deserción escolar por motivos personales y por cuestiones socioeconómicas. Yo les decía a las chicas que la UANL ofrece muchas posibilidades, yo estudié mediante becas; eso me preguntan mucho: ‘¿cómo te fuiste?’. Porque el dinero es importante”, expuso.
Durante una charla que sostuvo con estudiantes participantes del Programa Mujeres en la Ciencia, motivó a las jóvenes a buscar una experiencia en el extranjero si es el deseo de hacerlo, de buscar los apoyos económicos para lograrlo a través de los convenios entre instituciones educativas.
“Es difícil la experiencia, hay que adaptarse a una cultura nueva en un país distinto al tuyo; tal vez no es para todos irte al extranjero, pero si quieres eso y no está la infraestructura en nuestro país, hay que hacerlo y al mismo tiempo puedes seguir vinculada con las instituciones de tu país”, agregó Proskauer Peña.
Inspirar a otras mujeres con el trabajo
La doctora Stephanie Proskauer Peña, quien creció en el Barrio Antiguo de la ciudad de Monterrey, trabaja en el desarrollo de una prueba de diagnóstico del Alzheimer en etapas más tempranas, que identifique cambios muy sutiles en el comportamiento y que no se observan en los exámenes médicos.
La científica estudia grupos de neuromas que están constantemente comunicándose al hacer una acción y que sufren cambios, como los olvidos, cuando se rompe esa capacidad de conectar.
“Lo que hacemos en el laboratorio es neurofisiología experimental, estudiamos lo ‘normal’ del olvido y la memoria, y luego por qué se produce el olvido; hacemos mucha investigación en memoria con diferentes factores como el sueño o la esquizofrenia. Analizamos el comportamiento de las ondas cerebrales cuando la memoria está bien y cuando no lo está”, explicó.
Sin duda, una tarea científica que puede inspirar a más jóvenes a involucrarse en la investigación. El Programa Mujeres en la Ciencia tiene este objetivo, presentar a las estudiantes universitarias historias de vida que sean motivación para establecer metas y trabajar en consecuencia.
La egresada de la UANL expresó que la baja participación de mujeres en la ciencia y muchos ámbitos profesionales es algo que pasa en todas partes del mundo, no es algo exclusivo de México o América Latina, y esto se debe a los paradigmas y estereotipos aún vigentes.
“Considero que a veces una no cree en sí misma por cuestiones culturales o personales y no, hay que romper esos obstáculos que a veces son más mentales”, mencionó.
Fuente: Punto U / El Portal de Monterrey