Editorial |
Once Varas | Por: Obed Campos
De acuerdo a datos del Observatorio Astronómico Nacional, todavía le cuelga a esta maldita primavera y nos quedan al menos un mes y 10 días para que, ahora sí, nos azote el verano, el cual, de acuerdo a los científicos, llega a este hemisferio el jueves 20 de junio próximo.
Por eso extrañan las calenturas de Rodolfo Ambriz Oviedo, a quien, como en los carros viejos, a lo mejor se le tapó el termostato y anda sudando calenturas ajenas.
Lo digo, porque, aunque renegó del PAN, partido con el que se hizo de la alcaldía de Juárez, Nuevo León, en el trienio 2012-2015, ahora muy orondo dice que las flatulencias de Félix Arratia casi casi no huelen, y son más bien perfumes.
“Lo hicimos juntos en el 2012 , ahora junto a Félix Arratia y su gran equipo lo volveremos a hacer por el bien de juarez (sic)” apunta Ambriz en sus redes sociales, como si ya se hubieran olvidado allá en la tierra del tamal las malas cuentas con las que le salió a la ciudadanía.
En todo caso el que debería de pensarle bien que tanto le ayuda “el apoyo” de Ambriz, es el ex Secretario de Medio Ambiente, Félix Arratia, de quien lo menos que dicen en Juárez es que es un desarraigado, porque no es del pueblo.
Bueno, tan no es de Juárez que comentan en los cafés políticos que Arratia no sabe distinguir un tamal de cabeza que uno de dulce… Y eso ya es mucho.
LA DISCRETA SECRETARIA
La doctora Alma Rosa Marroquín Escamilla ha sabido imponer un serio de sobriedad a la Secretaría de Salud de Nuevo León que encabeza en esta administración. Lo suyo son las cuentas claras, pero la discreción ante todo.
Cualquiera otra u otro en su lugar, por ejemplo, hubiera bailado en un ladrillo y gritado a los cuatro vientos el triunfo que representó para la Secretaría el haber salvado la vida de la pequeña Bella, pequeña recién nacida siamesa que fue atendida en el Hospital Regional Materno Infantil, a donde llegó en marzo con su cuerpecito unido al de su hermana Beila.
“La menor evolucionó favorablemente tras la cirugía de corazón que le fue practicada el pasado 18 de abril por personal de ese hospital” cuenta un discreto boletín, que dio a conocer que la bebé, con dos meses de vida, ya fue dada a alta del nosocomio.
El esfuerzo de médicos, enfermeras y demás personal del Hospital Regional Materno Infantil, es un asunto que debemos agradecer todos los nuevoleoneses, porque, aunque Dios no lo quiera, da tranquilidad el tener manos tan benditas tan cerca de casa.
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