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Uno de los beisbolistas regios más queridos por la fanaticada de los Sultanes de Monterrey Miguel Flores, se convirtió esta noche en un inmortal del Salón de la Fama del Beisbol Mexicano.
El segunda base, actualmente Director Deportivo de los “Fantasmas Grises” nació el 16 de agosto de 1970 en Monterrey.
Tuvo oportunidad de jugar 15 temporadas en la Liga Mexicana de Beisbol, 14 de ellas con los Sultanes de Monterrey, convirtiéndose en un gran ídolo por su velocidad y destreza con el guante.
Sí, aquél joven de la Colonia Mitras que portó con orgullo en su espalda el número 400 en honor al Aniversario de la Fundación de Monterrey en 1996, fue entronizado en la categoría Jugadores del Béisbol Mexicano al son de El Corrido de Monterrey, junto a figuras como: Juan Manuel Palafox, Ramón Orantes y Cecilio Ruiz.
En una noche mágica y llena de nostalgia fueron galardonados también Yovani Gallardo por su destacada trayectoria en la Gran Carpa; Ricardo Sandate en la categoría Veteranos y Luis Alberto Ramírez, quien se convirtió en el décimo segundo umpire entronizado.
El recinto de los inmortales, construido en los márgenes de emblemático Río Santa Lucía por Don Alfredo Harp Helú, se vistió de gala para recibir a la Clase 2024, personalidades y aficionados a El Rey de los Deportes, que disfrutaron de una gran velada organizada de forma impecable por el equipo de Francisco Padilla Dávila, director del Salón de la Fama del Beisbol Mexicano.
Por: Raymundo Guerra | El Portal de Monterrey