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Especial / Staff UANL / Educación
La segunda generación 2015-2017 del programa Aula STUANL, integrada por 49 trabajadores de la Universidad Autónoma de Nuevo León, cristalizó una de sus metas: concluir sus estudios del nivel medio superior a través del sistema semipresencial.
El Rector Rogelio Garza Rivera y el Secretario General del Sindicato de Trabajadores de la UANL, Félix Martínez Lazcano, entregaron el 13 de junio las constancias a cada uno de los estudiantes ante la presencia de directivos, docentes y familiares en el auditorio de la Preparatoria 8.
“Con este logro, se refleja inmediatamente su compromiso de seguir trabajando y transformándose en hombres y mujeres de bien. Sin duda, es importante buscar trascender en el entorno de la comunidad y de la familia. Sabemos que ser trabajador, padre de familia y estudiante a la vez, no fue nada fácil, pero son pocos los que tienen la convicción de superarse, así que los exhorto a seguirlo haciendo”, expresó Garza Rivera.
Este proyecto inició en 2013 y tiene como sede la Preparatoria 8, ha permitido que más de 120 empleados de la Máxima Casa de Estudios finalicen sus estudios de preparatoria e inclusive, puedan continuar su preparación a nivel licenciatura.
“Ustedes, que forman parte de la segunda generación, de los 49 alumnos graduados, tenemos que 13 mujeres y siete hombres presentaron para la licenciatura de la UANL, así como cinco mujeres ingresarán a la Universidad Ciudadana de Nuevo León.
“La época actual es de exigencia, competitividad, calidad y de poder estar a la par de nuestros congéneres, y eso es lo que pretendemos lograr con este programa de superación. Ustedes son la muestra, ya que implica un esfuerzo extraordinario y son un ejemplo para la Universidad”, señaló el Secretario General del STUANL.
Las estudiantes Claudia Verónica Barrera Álvarez, Irma Leticia Hernández Gómez y Dolores Escareño Mendoza, fueron reconocidas por su alto rendimiento académico, con promedios de 96, 95 y 94, respectivamente.
“Hoy culmina una etapa de nuestra formación académica, en donde se refleja la dedicación, el esfuerzo, la entrega y el compromiso que adquirimos por dos años con gran motivación. Nos vamos felices y con seguridad de que nunca es tarde para buscar nuestra superación personal”, manifestó Barrera Álvarez, quien obtuvo el promedio más alto de la segunda generación.
Agregó que el haber cursado la preparatoria fue una experiencia enriquecedora, ya que iniciaron con temores, debido a que ya no son tan jóvenes; el volver a retomar el estudio no fue algo fácil, pero siempre lo hicieron con la mejor disposición para superarse.
Algunas de las dependencias a las que pertenecen los graduados son de Rectoría, del Sindicato de Trabajadores, Hospital Universitario, de la Facultad de Medicina, Escuela Industrial y Preparatoria Técnica “Álvaro Obregón”, Preparatoria 8, entre otras.
