Editorial |
Once Varas | Por: Obed Campos
Este es un consejo, que como tal, se toma a o se deja, para que Waldo Fernández haga caso y se apoye con Judith Diaz quien no me dejará mentir, de que la gente jamás sale a votar por senadores, diputados federales o locales.
Estando en puerta el 2024, Morena Nuevo León se vislumbraba con un futuro más prometedor, porque teniendo en Clara Luz Flores como su mejor carta, solos se dieron un balazo en el pie y salieron con sus ocurrencias de “Tómbola Política, a sabiendas de que aquí en la entidad es otra la película que se ve con respecto al resto del país.
La gente regia se caracteriza por ser auténtica y muchas veces nada contra corriente y ha elegido a los últimos 3 gobernadores con el estómago por lo que se pagan consecuencias.
Cada 6 años el pueblo sale a votar en primer lugar por el candidato a la presidencia, pero no con ello jala a que voten por sus senadores, prueba está en las elecciones del 2018 ganadas imbatiblemente por AMLO pero Álvaro Suárez y Judith Díaz apenas llegaron al tercer lugar.
Por otro lado a elegir gobernador “el gallo” ungido con el voto es quien jala a votar a la gente pero no con ello ganan un solo diputado local, allí está el caso de Jaime Rodríguez y Samuel García con la mayoría en las bancadas adversas.
Y por último, la gente sale a votar por sus candidatos a alcaldes porque son los rostros más cercanos y son a quienes reclamar todos los problemas de su vida diaria.
Ante una sumatoria de esto, entonces en una elección presidencial que será 2024, hay que llevar candidatos a alcaldes ganadores y no amigos o compromisos, porque en el pecado llevarán la penitencia.
Si Waldo quiere tener ligera posibilidad de quedar en segundo lugar, que se ve super complicado, debe hacer equipo con el Comité Estatal y con los diversos líderes de los grupos de la doctora Claudia Sheinbaum para apostar a mujeres y hombres en las alcaldías que vayan por votos y le ayuden al candidato al Senado a sumar, de lo contrario, el tercer lugar será el destino y quedará fuera de las curules.
Especialmente se debe llevar calidad en las candidaturas a los 12 municipios llamados metropolitanos para dar pelea, porque aunque la marca Morena sea la mas fuerte en Nuevo León, eso no implica que tengan garantizado el triunfo.
Es indiscutible, por otro lado que en cuanto a la candidata a la presidencia tienen fuerza y casi asegurado el triunfo con Claudia Sheinbaum, pero en lo demás, los militantes de Morena tienen que ponerse vivos en la selección de candidatos a las alcaldías y si hacen buen trabajo en los que van de diputados locales pueden esperar mejores resultados.
De buena fuente sé que ya operan en Nuevo León gente de todas las confianzas de la doctora Sheinbaum, e incluso de Marcelo Ebrard, haciendo equipo y eso presagia algo positivo.
No se equivoquen Waldo y Judith al momento de opinar si es que lo harán.
Judith ya fue senadora en el 2006 y ella debe saber que aunque Felipe Calderón no era el más fuerte, la gran ventaja fue que los azules en el Estado estaban unidos, organizados y con candidatos ganadores en toda el área metropolitana.
Tan así que después de ser aplastados en el 2003 por la corriente que significó Nati-PRI, recuperaron Monterrey, Santa Catarina y se quedaron muy cerca de Guadalupe, pero sí ganaron otros 13 municipios y diputados locales y federales.
Ante esta inercia y trabajo, Fernando Elizondo y Judith entraron juntos al Senado.
La historia, los números y las matemáticas no mienten.
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