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Premia UDEM excelencia y vocación de servicio de sus mejores docentes

Educación /

Las y los mejores profesores de la Universidad de Monterrey fueron galardonados con el Premio Pro Magistro Roberto Garza Sada, en el marco de la celebración del 52 aniversario de esta casa de estudios.

El reconocimiento que otorga la UDEM cumplió 25 años de distinguir a sus docentes más destacables y este año se entregaron dos ediciones.

Los ganadores en 2020 fueron Slendi Nalleli Marines Mendoza, en la categoría de Profesora de la Vicerrectoría de Formación Integral; Rubén Gutiérrez Guajardo, como Profesor Auxiliar de Educación Media Superior; Carolina Pérez Rojas González, por Profesora de Planta de Educación Media Superior; Arturo Azuara Flores, Profesor de Asignatura de Educación Superior; y Demófilo Maldonado Córtes, Profesor de Planta de Educación Superior.

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En tanto que en la edición 2019, los premios se otorgaron a César Alfredo Nanni de Valle, en la categoría de Profesor de la Vicerrectoría de Formación Integral; Roberto José Fernández González, como Profesor Auxiliar de Educación Media Superior; María Aurora Tamez Elizondo, como Profesora de Planta de Educación Media Superior; Roberto González Habib, por Profesor de Asignatura de Educación Superior; y Martha Claudia Rodríguez Villalobos, en el rubro de Profesora de Planta de Educación Superior.

La ceremonia de entrega de las preseas se realizó recientemente, encabezada por Álvaro Fernández Garza, presidente del Consejo UDEM; el rector Mario Páez González; y Alejandra Fernández Garza, consejera general de la UDEM y representante de la familia de don Roberto Garza Sada.

El Premio Pro Magistro Roberto Garza Sada fue instituido en 1995 gracias a la iniciativa y generosidad de doña Márgara Garza Sada de Fernández y su familia, y constituye la máxima distinción que la Universidad de Monterrey otorga a sus profesores como reconocimiento a su labor.

En su mensaje, Álvaro Fernández Garza relató que su madre, doña Márgara Garza Sada de Fernández, dio mucha importancia a la elección de la escultura que se entregaría como premio; revisó diferentes obras y propuestas de artistas, hasta que decidió: “¿Y si entregan la escultura de El hombre, (de Rufino Tamayo)?”.

Por su parte, Alejandra Fernández Garza narró que la visión de vida de don Roberto Garza Sada fue la inspiración de este premio, y su mamá, doña Márgara, fue quien lo concretó en 1995.

La consejera refirió que, en aquella época, la idea de doña Márgara era que los maestros deben ser cada día mejores, conocer más, estudiar más, viajar más lejos y vencer el estatus quo.

“Estoy segura que muchas familias escogen la UDEM no solo por su excelencia académica, sino porque aquí los profesores llegan más allá, trascienden la enseñanza académica para formar a nuestros hijos como personas para hacerlos hombres y mujeres de bien, íntegros, plenos y con valores”, indicó.

“Como familia nos sentimos muy felices de entregar este premio que vuelve tangible la trascendencia y que nos permite pasar de lo personal, de mi abuelo, mi madre y mi familia, hacia lo colectivo a través de los profesores y los alumnos”, expresó. 

El rector Páez González enfatizó que el Premio Pro Magistro Roberto Garza Sada enaltece conceptos que están en la esencia de la UDEM, como la excelencia académica y la vivencia de valores.

El directivo indicó que las y los profesores que ganan este reconocimiento han mostrado una enorme vocación de servicio a favor de la juventud estudiantil, acompañando al alumnado para dar su mejor esfuerzo como profesionistas y como personas.

“Gracias, profesores y profesoras, por su dedicación, por ir siempre en busca de la excelencia y por mantener vivo el legado de don Roberto; gracias por el amor con el que trabajan, por el compromiso que han mostrado con la UDEM, y por inspirar la mejor versión de nuestros estudiantes”, expresó.

Isabella Navarro Grueter, vicerrectora de Formación Integral, quien tomó la palabra en representación de los vicerrectores de la UDEM, indicó que el Premio Pro Magistro le recuerda a cada docente de la UDEM que su labor consiste no solo en impartir su disciplina con los más altos estándares de calidad, sino que además sea un verdadero  formador, que inspire para la vida y que ayude a descubrir el potencial de cada uno de sus estudiantes.

El Premio Pro Magistro Roberto Garza Sada considera para la selección de los ganadores aspectos como la excelencia académica, expresada en la evaluación al profesor; la vivencia de valores, manifestada en voz de sus alumnos; su contribución a la institución, tanto en el ámbito académico como en las actividades de formación integral; su formación personal, su trayectoria y su proyección hacia la comunidad.

Redacción / El Portal de Monterrey

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